Actualmente el precio de la electricidad ha aumentado considerablemente. Es por ello, por lo que cada vez más gente se suma a la tendencia en adquirir las ventajas del autoconsumo solar, con soluciones como la instalación de placas solares en comunidades de vecinos, para un consumo comunitario.
Han pasado unos años desde el polémico “impuesto al sol”, donde en un decreto de 2015 se regulaba el autoconsumo eléctrico, impidiendo compartir la energía fotovoltaica generada por una persona entre más personas ajenas a su vivienda. Posteriormente fue derogado, y gracias al real decreto de autoconsumo RD244/2019, se dio paso a la posibilidad de las instalaciones solares para comunidades de vecinos.
¿Qué es el autoconsumo colectivo entre comunidades de vecinos?
Según el decreto citado anteriormente, se trata de pertenecer a un grupo de varios consumidores, que mediante un acuerdo previo, obtienen un suministro de energía de instalaciones cercanas a ellos, pudiéndose beneficiar de la energía producida en una o más instalaciones de paneles solares.
Con esta normativa, se pueden beneficiar vecinos que anteriormente no dispusieran de un espacio para capturar la energía solar (propietarios de viviendas en un bloque de pisos), además de repartir los gastos asociados de la instalación entre todos los miembros del grupo.
¿Cuáles son los requisitos del autoconsumo colectivo?
Para que se pueda disfrutar del consumo común de esta energía, se debe cumplir, al menos, una de estas condiciones:
- Que tanto el generador como el grupo de consumidores tengan la misma referencia catastral.
- Que los contadores de la comunidad se encuentren a una distancia máxima de 0,5 km.
- Que el grupo de consumidores pertenezcan a la red de distribución de la instalación fotovoltaica.
Además, tendrá que ser de común acuerdo entre los interesados la forma en que se repartirá esa energía, y tener el permiso comunitario para poder montar la instalación.
Uno de los puntos que también será importante consensuar entre el grupo de vecinos, es elegir entre un autoconsumo con excedente de energía o sin excedentes. Si se permite excedentes, la energía que se genere y no se use, se puede distribuir a la red eléctrica y solicitar, a cambio, una reducción del coste de la energía consumida, hasta un máximo de 0€. Mientras que una sin excedentes no distribuirá ninguna cantidad de energía a la red eléctrica.
Instalación placas solares en comunidad de vecinos
Hoy en día el precio del gas, con un camino por recorrer hacia la protección del medio ambiente, conlleva a que producir emisiones de gases salga cada vez más caro (elevándose los precios de los derechos de emisiones). Consecuentemente, esto provoca que el precio de la electricidad suba de forma acelerada, a la vez que el interés de las personas en el autoconsumo energético.
Hasta podemos ver ejemplos como el pueblo del Valles occidental, en Barcelona, donde su ayuntamiento ofrece facilidades para contrarrestar esta subida de la luz, como bonificaciones en la fiscalidad del IBI de hasta un 50% si deciden elegir el autoconsumo solar. A esta iniciativa se sumaron unas 150 personas, instalando equipos solares por todo el municipio.
Esto también facilita la extensión de proyectos e ideas para la instalación fotovoltaica en comunidad de vecinos, donde al conectar los paneles solares de una instalación en un terreno o azotea, se distribuye por la red interna del edificio a todas las viviendas que así lo hayan acordado.
La distribución de la energía es como cualquier red eléctrica, con un contador que medirá cuánta energía se produce, y otro situado en cada vivienda que medirá el consumo realizado.
El futuro del autoconsumo energético
La red eléctrica de un futuro no muy lejano va a ser bastante diferente a la que veníamos conociendo. Para empezar, la generación de la energía fotovoltaica se distribuirá entre muchas más personas y estará más distribuida por toda la península, alejándonos de la clásica red eléctrica proveniente de unas pocas manos.
Por otra parte, con todos los consumidores de este tipo de energía, donde gran parte será de kilómetro cero, la demanda que se haga a la red pública será muy inferior a la actual, y no se dependerá tanto de las grandes compañías, lo que marca, sin duda, un antes y un después del consumo energético tal y como lo conocíamos.
Con la gran cantidad de edificios en todo el país, podemos asegurar que este tipo de instalaciones tienen un gran recorrido por delante.
En Greenheiss, como especialistas en equipos que utilizan energías renovables, apostamos por sistemas donde, además de ofrecer una gran eficiencia, permiten un gran ahorro energético, al conectarse a fuentes de energía renovable como los paneles solares, reduciendo de esta forma las emisiones de gases y aportando un gran valor medio ambiental.