Este tipo de combustible renovable lleva siendo parte del debate sobre el cambio climático durante muchos años, pues muchas son las personas que utilizan o quieren valerse de este tipo de energía totalmente ecológica para poder alimentar sus sistemas de agua caliente y calefacción. Veamos entonces qué materiales son necesarios para poder usar la energía solar.
La energía solar se vale de aprovechar la radiación electromagnética procedente del Sol para, a través del uso de placas fotovoltaicas, absorber toda su luz, transformándola en energía térmica para el uso doméstico.
El problema nace en la instalación en sí de dichas placas para poder absorber la energía solar. Indiferentemente de las personas que quieran instalarlas o valerse de ellas, las dudas suelen recaer en qué tipo de materiales deben utilizarse para, en el caso de querer construirlas, poder lograr una instalación perfecta.
Materiales necesarios para la instalación de energía solar
Realizar una instalación de placas solares en el hogar no es tan sencillo como parece. Antes de empezar es importante saber qué tipos de placas existen, cuáles nos interesan más y, acto seguido, examinar los materiales necesarios para la instalación de las mismas.
Materiales necesarios para la instalación
Para poder aprovechar todas las ventajas de tener placas solares en casa, es necesario utilizar una serie de elementos que resultan de vital importancia durante este proceso.
Nuestro objetivo final es poder captar la energía solar y transformarla en lo que nos interese.
Los principales componentes para una instalación de energía solar son:
- Paneles solares: Son el elemento más básico y evidente dentro de la instalación fotovoltaica. Este conjunto de celdas están conectadas entre ellas para poder absorber correctamente la energía solar para después poder transformarla.
- Baterías: De igual importancia durante la instalación, las baterías regulan y almacenan toda la energía captada por las placas, pudiendo después administrarla como creamos oportuno para nuestro beneficio. Además, estas baterías vienen con una reserva extra de electricidad en caso de necesitarla urgentemente.
- Inversores solares: Estos tienen la función principal de convertir toda corriente continua procedente de las baterías en corriente alterna. De esta manera conseguimos adaptar la electricidad a nuestras corrientes domésticas. Sus componentes, de alta eficiencia y seguridad, resultan claves para una buena instalación de placas solares.
- Estructuras fotovoltaicas: Dichas estructuras también son de vital importancia, pues dan soporte continuo a nuestros paneles solares. Además, por si esto fuera poco, facilitan la instalación de los módulos, pues los estabilizan a la vez que aportan solidez y una vida duradera.
Una vez hemos aclarado todos los materiales principales para valernos de la energía solar debemos ahora entender las ventajas que aportará este tipo de componente renovable.
Ventajas de utilizar la energía solar
Teniendo en cuenta el alto precio de la luz, si decidimos empezar a usar la energía solar como nueva fuente eléctrica y térmica nos encontraremos con ventajas como, por ejemplo:
- Nos ofrece todas las necesidades eléctricas:
Al poder transformar toda la energía solar en electricidad, la podremos utilizar libremente para cubrir todas nuestras necesidades.
- La energía solar es inagotable:
Sí. Es inagotable. Este tipo de energía durará tanto como lo haga el Sol. Además, es un tipo de combustible totalmente limpio, cosa que, además de darnos las ventajas más evidentes, estaremos contribuyendo en la lucha contra el cambio climático, ayudando a reducir la contaminación en el planeta.
- Disponibilidad universal:
Si bien la situación geográfica del país donde vivamos afecta claramente a la cantidad de energía solar que podemos obtener, el Sol siempre estará ahí para poder aprovechar esta energía.
Además, si decidimos vivir en un sitio apartado en medio del campo, no necesitaremos de circuitos eléctricos avanzados, tan solo de cielos despejados.
- Mantenimiento de placas muy económico:
A diferencia de cualquier otro sistema eléctrico o térmico, el mantenimiento de las placas solares no requiere de grandes gastos. En el caso de una revisión anual, una limpieza a fondo de los paneles será suficiente para garantizar su total funcionamiento.
- Reducción en la factura de la luz:
Cuando una vivienda familiar vive con energía solar, suele amortizar los gastos de inversión de dicha instalación en unos 7 años y, teniendo en cuenta que, como hemos dicho, las placas solares duran una media de 30 años, la amortización irá siempre a nuestro favor.
En otras palabras, una vez recuperada la inversión, la energía que produzcamos será completamente libre.
Desde Solar Greenheiss, como especialistas en sistemas de energías renovables, ponemos a disposición de los profesionales los materiales y herramientas para garantizar una instalación de energía solar de máxima calidad. Recomendamos asesorarse siempre por un instalador experto antes de realizar cualquier proyecto, para que pueda aconsejarle sobre el equipo que mejor se adapte a la vivienda.